A la hora de reformar una casa es normal enfrentarse al dilema de qué tipos de suelo son más recomendables. No existe uno idóneo, sino que existen una gran variedad de materiales y acabados en el mercado, cada uno adecuado a cada vivienda o a cada estancia de esta (en función del uso, de las condiciones ambientales de tu hogar, de tus necesidades y de tus preferencias estéticas). La elección de los tipos de suelo es sumamente importante debido a que es la parte de la casa que más tránsito va a recibir y por lo tanto tiene que responder a unos buenos resultados en cuanto a resistencia y durabilidad se refiere. Al realizar la obra, además, tampoco conviene pasar por alto el componente estético.

Normalmente, en estancias como el salón o los dormitorios se utilizan tipos de suelo con cierto grado de calidez, mientras que, en las estancias húmedas, como son cocina y baños, se buscan materiales antideslizantes y de fácil limpieza.

Desde Alto Nivel Reformas queremos haceros una clasificación general de los distintos tipos de suelos que recomendamos a la hora de llevar a cabo la reforma, valorando sus ventajas y desventajas, así como los espacios donde son más adecuados.

Tarima flotante o suelos laminados:

Son conocidos también como tarima laminada. Últimamente son los más utilizados en reformas.

  • Ventajas: son fáciles de instalar (en la mayoría de los casos no es necesario levantar el suelo existente), más baratos que los de madera, no se decoloran ni deterioran tan fácilmente, no necesitan ser acuchillados ni barnizados, existe una gran variedad de acabados que se asemejan a la madera natural.
  • Ten en cuenta que la tarima flotante estándar no tiene una buena resistencia frente a la humedad. Sin embargo, existe en el mercado tarima flotante especial para zonas húmedas, que, si cumplen con estas características y permiten instalar el mismo material en toda la vivienda, de manera que al reformar la casa no se rompa la continuidad visual entre zonas secas y zonas húmedas.
  • Espacios adecuados: principalmente salón, comedor y dormitorios, aunque se puede utilizar en toda la vivienda si se opta por el modelo resistente al agua, logrando una continuidad en toda la vivienda.

Suelo vinílico:

Es autoadhesivo en planchas o en láminas.

  • Ventajas: se instalan de forma fácil sobre suelos de otros materiales, son muy económicos, fáciles de limpiar y tienen una gran variedad de acabados (imitación cerámica, madera, mosaicos, etc). Es una alternativa sencilla y que puede abaratar los costes del proyecto de reforma.
  • Desventajas: componente plástico y de calidad inferior al resto de materiales.
  • Espacios adecuados: toda la casa.

Parquet o suelo de madera:

Actualmente es el tipo de suelo que menos se suelen utilizar al reformar una vivienda.

  • Ventajas: son cálidos, acogedores y buenos aislantes térmicos.
  • Desventajas: necesitan un importante mantenimiento (acuchillado y barnizado) periódico, son delicados en su limpieza por su alta absorción y no resisten del todo bien los cambios bruscos de temperatura.
  • Espacios adecuados: salones, comedores y dormitorios.

Suelos cerámicos o gres:

Son baldosas cerámicas que pueden ser de pasta blanca o de pasta roja. Son los materiales más tradicionales, que nunca pasan de moda gracias a su calidad y versatilidad en el diseño.

  • Ventajas: son muy limpios y fáciles de mantener.
  • Desventajas: resultan fríos, si la calidad no es buena se rayan enseguida, y si sufren golpes se puede fraccionar la capa superficial saliendo a relucir la capa roja interna.
  • Espacios adecuados: baños y cocinas. (También se podrían utilizar en el resto de la vivienda).

Suelo porcelánico:

Son también baldosas cerámicas, pero con características propias que las hacen diferentes. Se fabrican en una sola cocción. Actualmente es uno de los tipos de suelo más demandado.

  • Ventajas: son mucho más resistentes, tienen una baja absorción al agua, permiten imitar otros materiales (como mármol, piedra natural o madera) y resisten los cambios bruscos de temperatura. Permiten baldosas de mayor tamaño, incluso con aristas rectas (baldosas rectificadas).
  • Desventajas: tanto el material como el pegamento especial para la mano de obra son más caros.
  • Espacios adecuados: baños y cocinas, grandes superficies, terrazas y exteriores, platos de ducha de obra. (También se podrían utilizar en el resto de la vivienda).

Suelo de microcemento:

Mantienen una estética industrial que imitan el hormigón pulido.

  • Ventajas: no se genera escombro por lo tanto permite realizar reformas más limpias sin necesidad de levantar el piso existente (excepto en aquellos de parquet), es un material flexible que se adapta a distintas superficies. No es un material poroso, por lo que obtenemos una superficie sin juntas e impermeable.
  • Desventajas: son delicados, se rayan fácilmente y no se pueden limpiar con productos que contengan lejía.
  • Espacios adecuados: toda la casa. Recomendado para espacios minimalistas o lofts de estética industrial.

En Alto Nivel Reformas somos expertos en reformas integrales y parciales, sabemos qué tipos de suelo son mejores para cada estancia de tu vivienda. Tenemos una dilatada experiencia en reformas de viviendas y te podemos asesorar sobre las mejores opciones que existen en el mercado, viendo los diferentes modelos sobre catálogo o en las exposiciones de nuestros proveedores habituales. Pídenos información sin compromiso.