“Un correcto aislamiento ayuda a que ahorres en calefacción»

Esta afirmación parece algo fundamental a la hora de reformar o construir una vivienda en la actualidad, pero no siempre ha sido así.

 

Anteriormente no se tenía tanta precaución, ni se ponía tanta atención en el aislamiento, se confiaba esa labor a los grandes muros de adobe o de piedra. Sin tener que remontarnos tanto tiempo, hay muchos edificios construidos en Madrid sin cámara de aire o en los mejores casos con cámara de aire vacía.

 

En la actualidad hay muchos materiales que pueden hacer esa función de aislamiento térmico, hemos hablado de ello en anteriores artículos, incluso hemos subido un vídeo con los materiales de aislamiento básicos, no obstante en este artículo quería centrarme en el ahorro que vamos a conseguir si aislamos nuestra casa.

 

Os dejamos por aquí el vídeo que os comentaba en el que entrevistamos a un cliente al que hemos realizado un trabajo de aislamiento en su hogar:

 

En este caso hay que diferenciar dos tipos de aislamiento y lo vamos a diferenciar por el lugar donde lo vamos a colocar, aislamiento por el exterior, lo que se denomina sistema SATE, que son las siglas de Sistema de Aislamiento Térmico Exterior, o por el interior, el cual no tiene ninguna denominación específica, aunque podemos llamarle SATI como su «hermano» exterior.

 

El mejor de ambos y siempre es el que recomendamos hacer a nuestros clientes si las condiciones de la vivienda lo permiten es el sistema SATE por el exterior. De esta forma creamos una envolvente térmica muy efectiva evitando puentes térmicos y la siempre incómoda invasión del interior de la vivienda.

 

Es un sistema de aislamiento muy eficaz que se puede combinar luego con múltiples acabados, desde un enfoscado pintado, un monocapa o una fachada ventilada con cerámica, piedra o aluminio.

Este sistema va a evitar que nuestro muro de fachada reciba el frío o el calor permaneciendo mucho más tiempo conservando el calor interior de la vivienda en invierno y generando un efecto «cueva» en verano manteniendo la vivienda fresca en los días calurosos.

Es sin duda la mejor elección cuando te planteas aislar una casa.

Además tiene la ventaja de que permite eliminar humedades de condensación de las paredes frías en la vivienda muy difíciles de eliminar de otra forma.

 

La solución del SATE es la que más va a ahorrar en nuestra factura de Gasoil, luz o gas dependiendo del combustible que usemos para calentar nuestra vivienda. Cuanto más ineficiente sea nuestra calefacción mayor va a ser el ahorro conseguido, es decir, si la calefacción es de Gasoil el ahorro va a ser mayor que si la caldera es de gas o si disponemos en la casa de una aerotermia. Como norma general, cuanto mayor sea la factura mayor va a ser el ahorro. 

La solución del SATE se puede combinar con otras en el caso de cubiertas planas o inclinadas donde se puede estudiar cada caso en particular.

 

Una vez estudiada la solución del aislamiento por el exterior y descartada por problemas técnicos, no debemos rendirnos y podemos optar por una solución de aislamiento por el interior, menos eficaz, más «engorrosa» pero mucho mejor que no tener nada.

En este caso pondremos especial atención a las esquinas de la vivienda, donde se producen los mayores puentes térmicos, encuentros con vigas, con pilares y con forjados. Los elementos estructurales suelen ser los que más frío introducen a la casa ya que están más en contacto con el exterior y al ser un elemento macizo transmiten la temperatura exterior al interior con mucha facilidad.

Para este tipo de trabajos usaremos trasdosados y falsos techos de cartón yeso con estructura de aluminio y elementos aislantes como pueden ser lanas minerales, fibras aislantes u otro tipo de aislante térmico que nos permita ocupar el menor sitio posible en el interior de la vivienda.

Está solución va a reducir menos nuestra factura energética pero también la va a reducir y vamos a conseguir un ahorro importante si nuestra vivienda no está bien aislada en la actualidad.

 

Cabe destacar también el tema ecológico en el que no creo que se esté haciendo demasiado hincapié como es nuestra huella de carbono al climatizar nuestra vivienda. En los días de nieve y bajas temperaturas en Madrid por ejemplo llegamos a contaminar mucho más con las calefacciones de los edificios puestas a máximo rendimiento que con los coches que no podían circular, llegando a tener que establecer un  plan de contingencia para reducir la contaminación sin que los coches hubieran circulado en toda la semana.

 

Tenemos una asignatura pendiente en el aislamiento de los edificios para mejorar esa eficiencia, así como actualizar y hacer eficaces los sistemas de calefacción, huyendo de las calefacciones de gasoil comunitarias y tendiendo a las calefacciones individuales con aerotermia que actualmente es el sistema más eficiente.

Debemos tender al sistema de calefacción con suelo radiante y refrigerante con una máquina de aerotermia alimentada por placas solares en una vivienda bien aislada para poder conseguir una eficiencia máxima lo cual nos llevará a un sistema económico a la par que ecológico y sostenible en el tiempo.

 

Si necesitas más información no dudes en preguntarnos y estaremos encantados de estudiar tu caso en particular y ayudarte en todo lo que necesites.